viernes, 29 de junio de 2007

Elfos


"[...]-¿Esos son mantos mágicos? -preguntó Pippin mirándolos con asombro.
-No sé a qué te refieres -dijo el jefe de los elfos-. Son vestiduras hermosas, y la tela es buena, pues ha sido tejida en este país. Son por cierto ropas élficas, si eso querías decir. Hoja y rama, agua y piedra: tienen el color y la belleza de todas esas cosas que amamos a la luz del crepúsculo de Lórien, pues en todo lo que hacemos ponemos el pensamiento de todo lo que amamos [...]".

TOLKIEN, J.R.R., "El Señor de los Anillos", ed. Minotauro, Barcelona, 1998, p.398.

jueves, 28 de junio de 2007

Carnaza

El hecho, que soy uno de los blogs con menos comentarios en relación al alto número de visitas que recibo a lo largo del día.

Vuestra coartada, que no sabéis que añadir a mis tontunas.

La propuesta, dejar las tontunas llevado de un deseo incontrolado de fama y poder, y escribir una entrada tremendamente polémica que dé lugar a un amplísimo debate en el que tengan cabida todos los grupos parlamentarios. Puesto que el blog el mío, os doy a elegir:

- La asignatura de Educación para la Ciudadanía.
- El Día del Orgullo Gay.
- La política antiterrorista del Gobierno.

Tenéis hasta el domingo para depositar vuestro voto. Sin jornada de reflexión.

miércoles, 27 de junio de 2007

4105, el Gran Masturbador

Tras el breve y tremendamente polémico paréntesis dedicado a las ñoñerías, vamos a seguir con nuestra serie de semblanzas dadás como muchos me habéis solicitado por correo postal, electrónico y del otro. Esta noche toca 4105, el Gran Masturbador.

4105 ya os suena, porque salió en la entrada dedicada a 4104 a raíz de la trama urdida por 4106 en su plan de captación de mis cuerdas vocales y de las no tan vocales. Nada podía fallar, pero el amor se interpuso entre 4104 y yo, con erótico resultado. 4105 no permaneció del todo al margen. El hecho de ser un tenor agudo y un antihéroe totalmente pelirrojo le ayudó a no sucumbir a mi encanto fantasmal, materializado sobre todo en movimientos pendulares de mis orificios nasales y en usos subrepticios de la salsa bearnesa.

4105 recibe el epíteto suprascripto por la profesión que desempeñó desde que acabara sus estudios universitarios, puesto que cerca de dos tercios de los penes porcinos del Reino de Murcia han pasado por sus titilantes manos, que con un desparpajo -¡caramba!- fuera de lo común en estos casos, les extraían sus fluidos ricos en fructosa. Usaba la realización de una tesis doctoral como pobre coartada para disimular una desviación afectiva que fue retirada de la lista de enfermedades psíquicas por la última reforma urgente y parcial de la Ley de Arrendamientos Rústicos.

4105 abandonó sus labores triste y cabizbajo cuando le ofrecieron millones de euros y un puesto de directivo en una famosa empresa que vende al por mayor el codiciado fluido porcino rico en fructosa. Si le interesa a alguien, sale -¡caramba!- a 0'80€ el frasquito. Desde entonces, pasa cuatro tercios de sus días y sus noches en un Ford Focus grisáceo sobre cuyo parabrisas se hará instalar próximamente una vitrocerámica con el fin de no tener que salir del coche más que para simultanear el uso de sus esfínteres con la participación activa en nuestro coro.

4105 vive feliz junto a una bellísima chica portuguesa, un bellísimo husky jadeante, una bellísima gata loca y un bellísimo Salón del Reino propiedad de los testigos de Jehová. Colecciona galletas de Ikea, con las que nos agasaja en los múltiples guateques que organiza en su residencia habitual. Porque 4105 no para de organizar fiestas. A veces con lusitanas beodas, otras sin ellas, el caso es que a base de cócteles y fiestukis ha conseguido que su residencia habitual sea casi más habitual para nosotros que para él. Gracias a sus oportos, a sus juegos de mesa y a su Playstation 2 consigue mantenernos despiertos hasta altísimas horas de la madrugada, aunque 4106 suele objetar en subconsciencia al respecto.

4105, no contento con todo lo anterior, sabe tocar la música de la inmunidad del Supermario con un corneto renacentista que adquirió hace unos años, con erótico resultado. 4105 es anárquico, contesta que sí a cualquier cosa y lo más curioso es que no miente nunca. Su franqueza llega hasta límites inusuales, y va de frente incluso por autovías que no han existido jamás.

4105 es muy, muy especial. Se podría decir que, en cierto, sutil y metafórico modo, ha masturbado nuestros corazones.

martes, 26 de junio de 2007

Desahogo innecesario

Cuánto más conozco a muchos bloggers, más quiero a mi anciano aunque todavía bello perro salchicha. ¿Por qué? Pues porque mi perro tiene el pelico muy lacio y brillante y porque estoy harto de dolores, de lloriqueos y de impudicias.

Vosotros probad. Picad en algún blog, y de ahí viajad a otro, y a otro, y más, y más. No pasarán más de tres cuando os encontréis alguno cuya totalidad de entradas se puedan resumir así:

"Mi madre está pachucha y odio a mi padre desde que mi novia no me abraza porque mi novio se ha puesto a llorar de repente y he perdido al único amigo que me quedaba de la infancia horrible que pasé junto a mi otro único amigo que se volvió a morir anteayer, pero yo intento salir adelante reuniendo las poquitas fuerzas que me quedan aunque cada vez me note más débil y no sepa cuánto voy a aguantar".

Los comentarios suelen ser del tipo:

"Mucho ánimo, todos te queremos, eres el mejor, eres la mejor, eres lo mejor, nos ayudas con tu ejemplo, eres un campeón, te amo, te amamos, te aman, nadie te entiende y no te mereces nada de lo que te está pasando".

En uso de mi libertad, me quedan dos opciones:

- Passsssar.
- No passsssar.

Como hoy no me apetecía passsssar porque ya son muchos blogs, ya es mucha pupita y como todos sabéis el odio y el rencor son la base de nuestra civilización, os voy a escribir el comentario que yo les escribiría a todos los autores de esos lacriblogs que sacan nos sacan los sentimientos más melosos y afrutados de nuestras vísceras:

"Mira, hijico, por lo que veo eres aficionado a no mirar más allá de tu cordón umbilical, y por mí bien, por mí como si te rasuras el pubis con una wilkinson de triple hoja vibrátil, pero hoy no me apetecía mirarle el cordón umbilical a nadie y mucho menos a un completo desconocido. He empezado a leer tu entrada y han sido tales las náuseas ante la muestra de auténtica falta de vergüenza que demuestras que no he podido parar de leerla hasta el final, sólo por el placer mórbido de imaginarte en el futuro cocinando un sanjacobo sobre tu cpu y sazonándolo con los frasquitos de lágrimas coleccionadas de tus malos ratos. Cuando tengas ganas de ser feliz acuérdate de todos estos malos momentos y escribe otra entrada, no vaya a ser que dejes de darnos tantísima lástima".

Qué gustico.

sábado, 23 de junio de 2007

4104, el Niño

Primero, que a ver cuándo escribo algo sobre vosotros. Después, que menudo rollo que escriba sobre gente que nadie conoce. Ahora, que por qué he dejado de escribir sobre vosotros. Menos mal que me da igual porque hago las cosas pues así, como me vienen, a la gornú. Toca 4104, el Niño. Si no os apetece leerlo, mirad esto.

4104 también canta en mi coro, porque mi grupo Qtal! es un grupo formado únicamente por usuarios de Vodafone que cantan en coros. Nosotros somos rebeldes y corales, y no podéis hacer nada para cambiarnos. Lo conocí en mi infancia, cuando aún se llamaba Andrinúa y era famoso por los trallazos que pegaba jugando al metegol. Entonces éramos rivales, no conocíamos la misericordia mutua ni sabíamos lo que significaba "et in terra". Desde luego, nunca hubiéramos sospechado nada de lo que ocurriría años más tarde, en un Festival de Música Antigua de Daroca.

4104 y 4105, el Gran Masturbador, eran los brazos ejecutores de un plan malévolo e infalible diseñado por 4106, el Maestro. Su objetivo eran dos de mis cuerdas vocales. El resto no les interesaba, salvo quizá mi rodilla izquierda, por la que 4106 siente verdadera devoción. Así y todo, fingiendo cariño y sensualidad para atraerme hacia sus redes y ganarse así un puñado de corcheas solistas que 4106 les había prometido como recompensa, 4104 pronto sintió hacia mí algo que iba mucho más allá del interés, de la envidia y del sexo descarnado: la empatía humorística patológica, que nos sigue granjeando enemigos que ven en nuestras discrepancias con la realidad síntomas de autismo, es decir, de amor por Luis Eduardo Aute, el famoso trompetista de color.

4104 me ama, y yo amo a 4104. Él me ama por hacerle risa, por mis golpes de glotis y por mi habilidad para imitar a la diosa Atenea. Yo lo amo por hacerme risa, por su parecido con Tintín y porque me guarda rencor. Si alguna vez necesito rencor, él lo atesora en una cesta de mimbre que una anciana le fabricó con sus propias manos y su propio mimbre. Ahora mismo, mientras lee esto, está guardando un rencor que sabe que algún día puedo necesitar.

4104 disfruta con los libros y las películas, siempre que aquellos estén ambientados en un universo de magia y fantasía y en éstas aparezcan naves espaciales. Probablemente sufriría la muerte instantánea por síndrome de Stendhal si algún día alguien rodase una película ambientada en el año 4104 y protagonizada por un elfo oscuro, interpretado por Eddie Murphy en el papel del piloto de naves espaciales encargado de defender la tierra de un ejército de orcos ataviados con capas verdes.

4104 es, sobre todo, casi por encima de cualquier otra cosa, minucioso y esmerado. Haga lo que haga, ya sea cantar un motete, limpiarme los dientes, decorar una agenda, visitar un castillo en ruinas, fornicar en la celebración de una boda, amalgamar la pieza dieciocho o imitar a Lorente. Cualquiera de esas actividades son realizadas por 4104 como si fuese parte de un trato del que dependiera su vida. Pone casi tanto cariño en las cosas que pasan por sus manos como en las personas que pasan por su corazón.

4104 es, en definitiva, un hobbit. Si a sus padres les hubiera salido de otra raza habría sido un disgusto tremendo. A ellos les dedicaré el apéndice de su hijo. Será una apendicitis necesaria, indolora, sabrosa y colorista.

En el próximo capítulo: 4105, el Gran Masturbador.

Entrada de tránsito

Desde el miércoles ando algo magullado, furibundo, iracundo, viejuno y taciturno. Seguramente tiene que ver mi enclaustramiento con la tesis doctoral, que está haciendo que cada día que pase tenga más ganas de llevar largas barbas y bigotes y de vestir con levita y chistera. Me acuesto cansado, me siento frustrado y me levanto dormido.

Hoy ha sido un buen día, que ha acabado hace una hora y media con el visionado de una película acompañado de Chexpirit, su hermano Ramón y 4101. Como los cuatro llevábamos puestas las gafas y además las mías son de pasta, la taquillera nos ha vendido unas entradas monísimas para ir a ver "La última nota", una película francesa que tiene el mérito de ser la primera película protagonizada por actores que no mueven la cara y escrita por guionistas que no mueven el bulbo raquídeo.

Como proyecto a corto plazo, tengo en mente escribir una sátira malevolente sobre esos bloggers que se dedican a hacernos partícipes de su vida imposible, que nos cuentan cosas que no queremos leer y que escriben entradas tan cursis como las palomas de las tarjetas postales, que son todas unas antipáticas.

A ver si, ya puesto, reúno a las suficientes musas como para contaros algo de las veladas en casa de los Anfitriones. Mañana ceno con ellos y estoy desde ayer afilando mis sentidos para el banquete que les espera. A los cinco. A las nueve y media. A proximadamente.

viernes, 22 de junio de 2007

Paradigma

Mirad qué comentario me deja Pedropablomh en una entrada que escribí hace dos meses sobre "Hannah y sus hermanas" y tomad ejemplo de lo que yo entiendo como manifestación de amor universal, auténtica fraternidad y alianza de civilizaciones:

"Hola Amigo!

Leyendo tu mensaje veo que tienes los triglicéridos altos.

Mi papá también tiene lo mismo, pero hace 4 meses ha estado tomando un producto natural que ayuda a bajar los triglicéridos Sanamente y ahora los tiene en 200. Y eso es excelente.

Si te interesa saber más...puedes contactarme a mi correo: contacto@redomni.net


Att,
Pedro Pablo Mora H
www.redomni.net"

¿Cómo no lo voy a querer?

jueves, 21 de junio de 2007

Atraco

No le obedecimos, pese a que empuñaba un arma y nos amenazaba a gritos con matarnos si no le entregábamos el dinero. Cuando salió del local, perplejo y abatido ante nuestras miradas suplicantes, la decepción se nos hizo tediosa.

martes, 19 de junio de 2007

Desengaño

Primero fue James Cameron y el hallazgo de la tumba de Jesús y María Magdalena, y ahora esto.

¿Cual será la próxima artimaña arqueológica encaminada a acabar con nuestras señas de identidad?

Más esgrima: 10, el equipo perfecto

Mañana miércoles, hora local e inalámbrica, diez espadachines murcianos liderados por mí se enfrentarán con el grueso del Equipo Nacional de Pentathlon Aeronáutico en la Academia General del Aire de San Javier, tras haber sido retados y antes de haber sido derrotados.

Los que sobrevivan al asalto podrán bañarse en la piscina de agua oxigenada que a tal efecto tienen allí habilitada y degustar unas horchatas por cuenta de la casa de cada uno.

Quedáis invitados y sugeridos a rezar una oración subordinada de complemento directo por nuestra arma.

¡Cojoneyá!

And... we're back!

Con tales palabras inglesas como título de esta entrada os comunico a todos que la avería de internet ya ha encontrado debida solución a manos de un técnico de ONO que, pese a ser marroquí de nacimiento y tener cierto frenillo sublingual que me evocaba por momentos a Jiménez Losantos, se ha podido comunicar conmigo en perfecto polaco antiguo y en perfecto estado de conservación.

Como sé que Rubén, uno de mis grandes amigos informáticos y causa de casi todos los hematomas y heridas de mi torso, está ansioso por saber la solución al problema, por si él hubiera podido arreglarlo y llevarse así las dos cervezas que acordamos como pago, le diré que no, que jamás hubiera podido deleitarse con el espumoso néctar de cebada que guardo en el frigorífico para estas ocasiones. ¿Por qué? Porque no, porque era cosa de ONO, de un tornillito que había en una cajita bajo el balcón de mi casa.

El falso Jiménez Losantos me ha dicho que no tenía autorización para decirme la causa concreta del problema, pero a base de tararearle "Mrs. Robinson" en canesú he conseguido que susurrara algo como "claro, no tenías retorno". Quizá se refiriera a la conexión, quizá a mí. Nunca lo sabremos.

Lo importante es que estamos bien que a fin de cuentas es lo que importa. Eso y que tengo la sensación de que pasado mañana me van a llamar de "La ruleta de la fortuna".

viernes, 15 de junio de 2007

Interrumpimos la emisión

Desde "Está la cosa muy mala" comunicamos a nuestro lector habitual que por problemas de conexión de red alámbrica e inalámbrica en nuestra residencia habitual la publicación de ingeniosísimas entradas quedará en suspenso durante el tiempo que tarde en solucionarse la avería.

Aprovecho la ocasión, en calidad de entrenador de peces espada de este blog, para:

- Pediros disculpas por las posibles molestias ocasionadas en vuestros devenires cotidianos.
- Pediros ayuda informática para un caso clínico que nadie sabe diagnosticar.
- Pediros el teléfono de algún exorcista de guardia que cobre barato para el caso de que no sea un problema informático.
- Pediros trabajo.

Cualquier sugerencia será desechada a priori y considerada con entusiasmo a posteriori.

Por si algún astuto lector ha caído en la cuenta de que no se puede carecer de conexión y publicar entradas como la que estás leyendo ahora mismo, aclaro que la estoy escribiendo desde la Universidad y en horas de trabajo, lo cual no debería suceder si quiero depositar la tesis doctoral antes del año 2046.



jueves, 14 de junio de 2007

4103, el Mago

No temáis. No voy a pasar los cuatro meses que me quedan de vida hablando de mis amigos Qtal! Pienso seguir intercalando relatos con abismos y crónicas murcianas. Entre otras cosas, porque el número de visitas al blog ha decrecido en progresión cilíndrica y ya sabéis que la progresión va por dentro. Pero, como ni se me ocurre ningún relato con abismo ni me ha pasado nada digno de mención, os voy a relatar la vida, obra y milagros del gran 4103, llamado El Mago.

4103 es, quizá, el miembro del grupo con el que más tropiezos he tenido a lo largo de toda mi vida. Retraído, enfermizo y un tanto propenso al clembuterol, pasó su niñez inadvertido dentro de una tortilla francesa poco cuajada. Le comencé a conocer cuando tenía veintiún años, pero él aparentaba muchos más, y con frecuencia lo confundían con su propio abuelo, desaparecido años atrás en extrañas circunstancias cuando se le acabó la beca predoctoral que había dedicado al estudio del síndrome de la vejiga errante.

4103 sufrió la primera de una larga cadena de mutaciones poco tiempo después. Eso ha provocado que sean muy pocas personas las que actualmente le reconocen, dada su facilidad casi insultante para mimetizarse con el entorno. A 4103 le gusta el Cine y la Música, y se sintió incomprendido cuando descubrió que es lo que todo el mundo escribe al rellenar la casilla "aficiones". En este sentido, compensa su falta de originalidad con el odio atávico que profesa al fútbol en cualquiera de sus modalidades, ya sea fútbol español, americano, fútbol sala o baloncesto.

4103 ha sido violinista en el sótano o sotánico (o sea, con sotana, como los jardines sotánicos de Madrid), monje deshabitado (o sea, sin hábito, como los jardines sotánicos de Madrid) y, recientemente, presidente investido (o sea, desnudo). Pese a las cantidades ingentes (o sea, deshabitadas) de comida que engulle, no consigue engordar más que uno o dos gramos al año (o sea, como mucho), y el sábado pasado dos cerrajeros intentaron persuadirle de su inexistencia física.

4103 se lleva últimamente muy bien conmigo y con el resto del grupo. Es conocida la admiración mutua que siente hacia 4101 y 4102, con los que ha compartido coro, habitación y tejido mesodérmico. En el fondo, muy en el fondo, sé que 4103 me quiere tanto o más que al resto. En cualquier caso, me alegro de que disimule. Y se lo agradezco.

En el siguiente capítulo: 4104, el Niño.

miércoles, 13 de junio de 2007

4102, la Diva

Queridos amigos y amigas del programa "Semblanzas". Hoy hablaremos de una chica muy especial. Una chica que, si no acapara ya vuestra atención, es porque aún no la conocéis. Procurad que no se entere de que no acapara vuestra atención. Se trata, como imagináis, de 4102, la Diva.

4102 se topó conmigo cuando yo contaba con la tierna edad de diecinueve años y ella con la edad de diecinueve años. Por aquel entonces salía con un chico griego que llamaba mucho la atención porque tenía la frente y la nariz unidas sin solución de continuidad. También cantaba de soprano en el mismo coro que yo (ella; él tocaba el tambor), pero eso es muy secundario.

4102 pronto se dio cuenta de que podía dar mucho más de sí. Podía dar de sí, de do y, con grandísimos esfuerzos, de re bemol. Y como tenía buenos amigos como yo que la animábamos a que se fuera lo más lejos posible, acabó entrando en la ESMUC, provincia de Barcelona. La verdad es que seguimos echándola de menos, porque es de las pocas chicas que conozco que tiene auténtico sentido del humor, es decir, que se ríe de mis chascarrillos y no pone cara ni cuerpo de asco cuando uno de nosotros dice "culo" o "teta". Es más, nos incita a decir esas palabras e incluso algunas peores, tales como "royalty".

4102 estaba ya deseando entrar a formar parte de esta enumeración. Cuando la llamé, lo primero que me dijo con su voz de soprano barroca fue que estaba en Estocolmo en una gira de conciertos viendo una puesta de sol que no acababa nunca y atiborrándose de galletas untadas en mantequilla y toffees, que son costumbres muy de ella. Se quejó amargamente de que no la hubiera incluido a ella como fundadora principal junto con 4101 y mostró su indignación cantando el Lamento de Ariadna tres tonos por encima de lo normal, con el consiguiente desconcierto de la comunidad homosexual sueca.

4102 da giras y graba cedés. Incluso graba algunas giras. Lo que hasta ahora no hace es dar cedés. Tiene una voz privilegiada, y si no rompe vasos es por el respeto que siente hacia las vajillas y cristalerías. Cuando se sube a un escenario se hace con el público en pocos segundos. Si, además, es para cantar puede provocar diversas patologías emocionales entre los asistentes.

4102 hace dieta macrobiótica, que es como engullir pedacitos de papel de estraza rociados cuidadosamente de mayonesa con remolacha. Al igual que 4101, es culpable de que me atraiga Woody Allen no sólo en el plano físico. Es hospitalaria hasta el extremo, capaz de hacer que me sienta como en casa en cualquier sitio habitado por ella, aunque haya puertas con pegatinas de ERC-IC y de cerdos con la bandera de España.

4102 no va a tardar nada en llamarme para comunicarme alguna noticia tremenda. Espero que sea buena. La noticia y, a ser posible, ella.

En el siguiente capítulo: 4103, el Mago.

domingo, 10 de junio de 2007

4101, el Fundador

Comienza con esta entrada un nuevo género dentro de este blog irregular y ciclotímico: el género semblante, relativo a semblanzas, caracteres extractados y panegíricos. Probablemente me gane así la antipatía de todos los protagonistas a base de ofensas reiteradas y de todos mis lectores, que ni saben ni quieren saber nada de los protagonistas. De tal modo podré cerrar el blog de una vez por todas y cultivar guisantes.

Voy a empezar a semblantar a los componentes de mi grupo Qtal! de antaño Airtel, hogaño Vodafone. Podía haber empezado por los amigos de mi infancia o por mis mascotas colaterales, pero no me da la gana. Mi grupo Qtal! se merece eso y mucho más. Y si alguien se molesta, ahí tengo unos guisantes que no se cultivan solos.

Bien. Como iba diciendo, 4101 es el fundador del grupo (lo llamaré 4101 para preservar su intimidad; puede que en algún momento incluso le llame Mr. 4101, para preservarla aún más). A 4101 lo conocí cuando llegué a mi segunda decena de vida. El Destino me recompensó con él por sobrevivir. Pese a las lógicas desaveniencias, pronto comprendimos que nuestro parecido físico nos uniría para siempre. Muchos amigos comunes nos confundían, y llegaron a motetarnos como "Los gemelos del sur" o "South Twins". En cierta ocasión, un cirujano intentó separarnos creyendo, como tantos otros cirujanos, que éramos siameses. Y un veterinario intentó cruzarnos, creyendo igualmente, como tantos otros arquitectos, que éramos siameses. Lo más curioso es que 4101 tiene ya un hermano mellizo, pero no se le parece en nada salvo en el físico y en la composición molecular.

4101 ha vivido en Murcia, en Madrid y otra vez en Murcia. Diseña submarinos y sueña con viajar algún día en ellos. Su afición por las cacerolas inconstitucionales le ha conllevado el roce con algún miembro de la oposición, pero él es fiel a sus ideas y, como ya dije en un post del que no os acordáis, es tal su empeño en tener razón en todo, que cuando no la tiene es capaz de documentarse tan concienzudamente que acaba siempre por hacerse con ella.

4101 también canta, como yo. Bueno, cuenta una antigua leyenda hebrea que canta mejor que yo, pero no es más que una vieja historia sin más fundamento que la realidad. Es tan tenor como parece a primer oído y desde que le picó una esponja radioactiva tiene el superpoder de absorber el timbre de voz de todos los tenores que se encuentren en un radio o cúbito de diez kilómetros. Casi siempre usa su poder para el Bien.

4101 es, en gran medida, culpable de mi afición a Woody Allen y a Les luthiers. Su sentido del humor es irrepetible, finísimo, sutil hasta en el volumen. Cuando todos los demás miembros del grupo berrean, él susurra una cuchufleta ingeniosísima que permanece flotando unos segundos en el aire a la espera de que el intelecto de algún posible miembro de Mensa la capte y se ría a carcajadas.

4101 es astuto como los hijos de las tinieblas y bueno como los hijos de la luz, a elegir. Tiene carácter y lo demuestra cuando frunce el ceño y te mira con ojos de ira y lujuria. Sin embargo, tras una apariencia que algunos tildan de huraña, se encuentra un verdadero gourmet de las relaciones humanas, tan incapaz de renunciar a sus principios como, llegado el momento, a algunos que ni siquiera son suyos, por pura amistad y cariño.

4101 mantiene actualmente una relación estable y tórrida con 4108, de la que hablaré cuando le llegue el turno.

Por ahora es suficiente con esto. Espero no haber avergonzado a 4101 más que lo suficiente, ni molestado más que lo necesario.

En el siguiente capítulo: 4102, la Diva.

sábado, 9 de junio de 2007

Meme(z)

Romay Beccaría me hace partícipe de un meme consistente en mencionar cuatro comportamientos de los que nos avergonzamos cuando los llevamos a cabo en una ferretería durante alguna festividad hebrea con un crêpe de dulce de leche sobre el hombro izquierdo. Allá voy:

- Restaurar un sistema operativo.
- Vertir residuos nucleares.
- Pensar en el pasado.
- Depositar dinero en un ataúd.

Hale.

Y ahora, todavía sonriente y emocionado por tan catártica experiencia que tanto os sirve a todos los bloggers para conocerme muchísimo mejor que antes, paso el testigo a Pedro Ruiz, a Leopoldo O'Donnell y al actor que hacía de padre en "Alf".

¡No rompáis la cadena, chicos!

jueves, 7 de junio de 2007

Acceso casi permitido

Me pide Pablo que cambie el tono de mi blog, que está demasiado tétrico y empieza a resultar repetitivo con tanto abismo, con tanta muerte y con tanta gaita en sentido figurado o, lo que es lo mismo, literal. Sé que su deseo es que os hable a todos de La casa azul y de Guille Milkyway, pero no ha llegado el momento. Todavía no estáis preparados y Pablo debe entenderlo.

Podría hablaros de "Piratas del Caribe 3", que es el punto intermedio entre el suicidio y el chiclepop, pero prefiero no hacerlo para no herir mi propia susceptibilidad. Una película en la que se combinan con inusitada torpeza bufonadas vodevilescas con escenas de gore (Verbinski), no debería ser apta más que para su aplicación en el anhelado método Ludovico.

Así que, Pablo y demás lectores, por ahora tendréis que conformaros con mis crónicas distorsionadas y con mis relatos no siempre tan mórbidos.

No doy para más ni menos.

A posteriori

No suelo pensar demasiado en el suicidio.

Disparé, sin más.

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Nota aclaratoria:

Esto es Arte y literatura, no Historia, lo cual indica que pretende ser un microrrelato y no una crónica de nada. No pienso en suicidarme. Si acaso, suicidaría a otros.

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martes, 5 de junio de 2007

El Gimell

Narra el Profesor Vorjes que, en 1846, durante el transcurso de una de sus frecuentes y normalmente poco fructíferas expediciones a Torrevieja, encontró una historia tallada sobre la arena, entre varias sombrillas. Sacó su bloc para intentar transcribir algún fragmento especialmente interesante, aun a sabiendas de que más tarde, con un poco de suerte, tardaría años y años en encontrar sus anotaciones. Herbert, mi hijo póstumo, tras acariciarme como cada día durante unas horas el entrecejo, me habla del hallazgo del bloc bajo uno de los premolares de un contable japonés de mediana edad. Desde su celda, durante una de sus últimas entrevistas, éste sigue asegurando que jamás hubiera tratado de ocultar el bloc del Profesor Vorjes, mientras devora con avidez el diario de Ana Frank, el cuaderno de bitácora del Capitán Achab y un mapa geográfico con los principales afluentes del Guadalquivir. El bloc se conserva milagrosamente intacto, y el odontólogo que lo descubrió murió calcinado poco después cuando intentaba abrir una bote de melocotón en almíbar.

Herbert se sienta sobre mi regazo y da un sorbo a su taza de té, pero antes de que comience la narración llaman para ofrecernos un piso en multipropiedad. No parece mala oferta, pero declinamos cortésmente la oferta utilizando únicamente adverbios de tiempo.

El Profesor Vorjes, o doña Brígida, como se le conocía en las puestas de largo a las que acudía sin previa invitación, transcribe en su cuaderno la celebración de un matrimonio, aunque por las anotaciones a pie de página y las frecuentes acotaciones, muchos historiógrafos opinan que se trata de una copia textual de la sección deportiva de un diario portugués.

Le pido a Herbert que continúe su exposición. Sorbe con delicadeza otra vez su vaso de café con leche, carraspea y se queda profundamente dormido. Prefiero no despertarle y empiezo, tembloroso e inquieto, a escribir yo mismo sobre la ceremonia contenida en el hallazgo del anciano Profesor. Pienso en el claro de luna de un bosque escandinavo bajo una bóveda de cielo estrellado donde dos jóvenes de rasgos nórdicos entrelazan sus manos jurándose fidelidad eterna ante la mirada cómplice de venerable clérigo del poblado. Es una imagen que me ayuda a relajarme cada vez que me asaltan mis frecuentes crisis de ansiedad. Mucho más tranquilo, escribo ya sobre el manuscrito de Vorjes.

Arual conoció a Legná en la Academia donde éste impartía sus clases. Pronto descubrió que Legná no era como los demás chicos a los que había conocido, no tanto por su color verdoso, sus alas de murciélago y su curiosa habilidad para resolver autodefinidos sin necesidad de bolígrafo, como por aquella inusual forma de mirar. Cuando Legná la miraba con su ojo derecho parecía transmitirle el mismo amor que ella le empezaba a profesar, y cuando la miraba con su ojo izquierdo sentía la necesidad de recorrer grandes distancias en monociclo. Un día, Arual se acercó a Legná y, bajo el pretexto de pedirle matrimonio, consiguió que le aclarara unas dudas sobre la clase del día anterior.

Mucha gente acudió a la ceremonia. Entre ellos destacaba Kovak, joven alquimista amigo de la pareja, que acudió acompañado de su inexperta y voluptuosa aprendiz, la joven Narfie. A Kovak y Legná les unía una amistad que se había consolidado en la fragua del tiempo, pues ambos se conocían desde hacía ya casi diez minutos e intuían que uno de los dos pronto sería acusado del suicidio del otro.

En este punto, Herbert despierta y bosteza. Se refresca los labios con otro sorbo a su copa de almizcle y me pide que acabe con la narración. Llaman a la puerta. Cuando la abro, me encuentro con dos paisanos vestidos de policía, que me piden que les acompañe a comisaría. Herbert llora y, consciente de mi destino, me acaricia el entrecejo por última vez.

viernes, 1 de junio de 2007

Altruismo

Crece día a día el número de personas que procuran nuestra felicidad para cuando dentro de unos años volvamos la vista atrás.

No nos los merecemos.

Vivan las caenas

Me piden que escriba las cinco primeras frases del segundo párrafo de la página 139 del libro que esté leyendo y que pase el testigo a otras tres personas en lo que parece ser una cadena bloguera y literaria, y yo que no me sé negar a este tipo de peticiones, transcribo a continuación el siguiente fragmento:

"Aunque no soy vengativo -concluye Paranoico-, siento una alegría infinita al ver que, desde que le dieron el Premio Nobel, lleva ya catorce doctorados honoris causa y aún le esperan muchos más. Eso le tiene tan ocupado que ya no escribe nada, ha renunciado a la literatura, se ha vuelto un ágrafo. Me satisface mucho ver que, al menos, se ha hecho justicia y han sabido castigarle..."

Enrique Vila-Matas, "Bartleby y compañía", Anagrama, 1ª ed., Barcelona, 2000.

Y paso el testigo a Agus, Francis y Jose.